Sólo por hoy intentaré recordar, cuando choque con otra persona,que en las relaciones interpersonales nada es blanco ni negro,que las personas no somos ángeles al cien por cien ni demonios en el mismo porcentaje, que todos tenemos nuestros demonios internos y que quienes somos enfermos mentales, sea cual sea nuestra patología, tenemos una lógica que no siempre casa con la lógica de las llamadas personas «normales», pero que eso no convierte a los demás en ogros. Las personas están en su derecho de no entendernos pero eso no puede darnos vía libre para demonizarlos. Sólo por hoy y así un día tras otro. N.B: la imagen que acompaña este post…

Este pasado día 13 de julio fue el cumpleaños de la tercera persona que da vida a este blog junto a Lou Martin y a mí. Como sé que es una persona a la que le gusta pasar desapercibida me limitaré a desearle un año entero para ser la gran persona que es, ser lo más feliz que pueda y que me siga honrando con su amistad,que para mí es un tesoro muy valioso.

Sólo por hoy voy a intentar no abusar de la paciencia de quien tengo más cerca.  Soy una persona enferma, es cierto, y necesito ayuda y apoyo, pero todos llevamos dentro nuestras cosas y no debemos sobrecargar a nadie de más de lo que tiene como si lo nuestro fuera lo único importante. Quien nos quiere nos apoya pero no es nuestro siamés particular. Intentemos graduar un poco nuestra necesidad de que nos salven de nosotros mismos y pidamos ayuda cuando veamos que lo hemos intentado y no hemos podido… ESO SI, POR FAVOR ,NO ESPEREMOS A ESTAR AL BORDE DEL ABISMO NI EN MEDIO DE UNA CRISIS PARA PEDIR…

La parte técnica y muy humana de este blog cumple años hoy y no quería dejar pasar la oportunidad de felicitarla públicamente. Que cumplas muchos años más y que podamos verlo. Gracias por ser esa luz en la sombra que ilumina como el sol.

«Un deseo de estar a cargo de nuestras propias vidas, una necesidad de control, nace en cada uno de nosotros. Es esencial para nuestra salud mental, y nuestro éxito, que tomemos el control»- Robert Foster Bennett.

Cuando escribo intento hacer hincapié en que es imprescindible ser conscientes de quiénes somos, con lo bueno y con lo malo, y con qué vivimos, de manera que podamos ir capeando de una manera u otra cada día o cada crisis que el TLP (o la depresión aguda crónica o el TOC) coloca en nuestro camino. Intento explicar que es necesario para nuestra supervivencia, pero quizás hay algo que no he mencionado, o no de la manera correcta: conocer nuestros propios límites. Yo tengo un defecto, desde muy pequeña, que en cierta forma me ha ayudado pero en otra me ha hecho y me hace mucho daño, y es que…

«La salud mental necesita una gran cantidad de atención. Es un gran tabú y tiene que ser encarado y resuelto» – Adam Ant.

¿Qué es lo que no parezco? ¿Una persona con depresión crónica mayor, trastorno obsesivo compulsivo, trastorno límite de la personalidad y anorexia, entre otras cosas? Pues no, la verdad es que no lo parezco. Las personas no solemos llevar carteles indicándonos. Es curioso que haya personas que me hayan dicho que no parezco lo que soy, que se ve muy normal, como si la representación que tuvieran en su mente de una persona de mis características fuera la de una arañándose la cara con unas uñas de veinte centímetros llenas de mugre entre aullidos y estertores, vestida con los harapos que encuentra en el contenedor y con el pelo que barre…