Fátima, que no apuesten por ti es patético. Sólo un alma cruel puede hacer tal cosa. Han de querernos tal y como somos, con nuestra enfermedad sobre todo, empatizar, vivir esa enfermedad con nosotros, aprendiendo de qué va para saber cómo actuar cuando todo “no vaya bien”. Eso sí es amor. Un abrazo. Manuel Castellanos Plaza.
Un comentario
Manuel Castellanos Plaza
Fátima, que no apuesten por ti es patético. Sólo un alma cruel puede hacer tal cosa. Han de querernos tal y como somos, con nuestra enfermedad sobre todo, empatizar, vivir esa enfermedad con nosotros, aprendiendo de qué va para saber cómo actuar cuando todo “no vaya bien”. Eso sí es amor.
Un abrazo.
Manuel Castellanos Plaza.